El diseño de interiores no solo refleja estilos y modas, sino también los valores y prioridades de cada época. Este 2025, las tendencias apuntan hacia un equilibrio entre funcionalidad, sostenibilidad y la necesidad de crear espacios más humanos y acogedores. A continuación, exploramos cinco líneas clave que marcarán el rumbo este año:

1. 1. El auge de los colores metálicos
   2. Estética cálida y táctil
   3. Mobiliario curvo y formas orgánicas
   4. Revalorización de lo artesanal y local
   5. Naturaleza como musa del diseño

1. El auge de los colores metálicos

Este 2025, los acabados metálicos en tonos como oro rosado, bronce y cobre ganarán protagonismo en el diseño de interiores. Desde luminarias hasta pequeños detalles decorativos, estos tonos aportan un toque de lujo discreto y modernidad.

Además, se busca integrarlos con materiales más neutros, como la madera o el mármol, para lograr un equilibrio sofisticado y acogedor.

2. Estética cálida y táctil

Los interiores de 2025 se alejan de la frialdad minimalista para abrazar una estética más cálida y sensorial.

Materiales con texturas agradables al tacto, como la lana, el terciopelo o los acabados mate, se combinan con colores tierra y tonos orgánicos como el terracota, el marrón avellana o el ocre. Estos elementos crean espacios acogedores que invitan a la desconexión.

3. Mobiliario curvo y formas orgánicas

Las líneas rectas dan paso a curvas suaves y diseños inspirados en la naturaleza. Sofás, mesas y sillones con formas redondeadas y fluidas serán un «must» en 2025, añadiendo dinamismo y movimiento a los espacios.

Este mobiliario no solo es visualmente atractivo, sino que también ayuda a crear ambientes más relajantes y armoniosos, alineados con el diseño biofílico.

4. Revalorización de lo artesanal y local

La búsqueda de autenticidad lleva a un redescubrimiento de las piezas hechas a mano. En lugar de optar por productos genéricos, los consumidores valoran la historia y la singularidad detrás de cada objeto.

Muebles de madera tallados, cerámicas pintadas a mano y textiles elaborados por artesanos locales serán los protagonistas en la decoración del próximo año.

5. Naturaleza como musa del diseño

El diseño biofílico se mantiene como una tendencia fuerte, pero este 2025 va más allá: la naturaleza no solo se incorpora como elemento decorativo, sino que inspira formas, colores y patrones.

Desde muebles que imitan líneas orgánicas hasta paredes con revestimientos vegetales, los interiores buscan conectar con el entorno natural para mejorar el bienestar físico y emocional de quienes los habitan.

La gran tendencia de diseño de interiores en este 2025 será crear espacios que sean un reflejo de las personas que los habitan. Las claves: bienestar, sostenibilidad y capacidad de para adaptarse a la vida moderna.

Si quieres saber más sobre los productos de AB, visita nuestra página de productos y descarga nuestros catálogos, con información precisa de cada modelo.