El mármol travertino es una estética que ha trascendido al paso del tiempo. El corte de esta particular piedra lleva siglos decorando espacios con un aire elegante y natural, dos características que le han permitido adaptarse a las tendencias de la arquitectura y el interiorismo más contemporáneos. A través de la cerámica, el mármol travertino encuentra nuevas formas de adaptarse a las construcciones modernas a través de nuevos colores, formatos, materiales y acabados. Estos son los atributos que lo convierten en una inspiración tan interesante.

Renovarse o morir: diferentes tonos y acabados

Para sobrevivir al paso del tiempo, el mármol travertino ha ido matizando su estética clásica con nuevos tonos y acabados. Colores que ofrecen una mayor profundidad a arquitectos y diseñadores para encontrar el estilo más adecuado en cada espacio.

El acabado también juega un papel importante en el estilo. Un acabado natural ofrece un aire más cercano a la piedra, mientras que el acabado pulido representa la versión más clásica del mármol.

Más posibilidades que nunca

La constante innovación en los procesos de producción cerámica multiplica las posibilidades de las piezas, que se adaptan a las necesidades de los profesionales del interiorismo y la construcción a través de diferentes formatos, diseños e incluso materiales.

Revestimiento: Palatinum Beige 30 x 90 cm. ― Pavimento: Palatinum Beige 60 x 60 cm.

De esta forma, una misma colección puede dar respuesta a diferentes opciones, desde láminas de 260×120 cm a piezas de pasta blanca para revestimiento en formatos más pequeños, como el 30×60 cm. Por otro lado, estas piezas también ofrecen la posibilidad de contar con relieves tridimensionales, lo cual otorga un aire decorativo muy interesante para las superficies, imposible de lograr a través de otros materiales.

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